Los componentes de transmisión sin contacto son piezas mecánicas que utilizan la fuerza magnética para transmitir movimiento sin necesidad de contacto físico. El movimiento de rotación se produce aprovechando las dos fuerzas de atracción y repulsión que surgen del campo magnético de un imán potente. El uso de componentes de transmisión sin contacto permite una transmisión de potencia eficaz y silenciosa a la vez que minimiza la generación de partículas. Además, la transmisión sin contacto evita eficazmente la formación de engranajes y posibles daños durante el funcionamiento. Estos componentes también ofrecen un amplio espectro de opciones de centros excéntricos y ángulos de instalación, lo que facilita los procesos de desmontaje y centrado. Son especialmente adecuados para entornos como salas limpias, maquinaria de procesamiento de alimentos y bombas, donde debe preservarse la limpieza. Varios de estos componentes incorporan imanes permanentes, que tienen una larga vida útil. Además, muchos tipos están diseñados para su uso en exteriores. Entre los materiales habituales se encuentran los metales, y la capacidad de resistencia al calor viene determinada por las propiedades del material.